Mujeres que inspiran 2023: iniciativas para cambiar al mundo

Archivado en: Historias EARTH
Fecha: 6 de Julio de 2023

En la noche del 13 de junio, el escenario del Auditorio Emory L. Cocke, en el Campus Guácimo, se llenó de fuerza femenina. Seis mujeres se presentaron frente a las y los expectadores para hablar de sus vidas, de sus proyectos, de su forma de ver y cambiar al mundo para convertirlo en un mejor lugar. Las seis mujeres usaron sus voces para decirle a quienes las escuchaban que todas las acciones cuentan y que todos, de una forma u otra, podemos transformar nuestro entorno de la mejor manera posible.

“Mujeres que inspiran” es un ciclo de eventos que nació en el 2022 y que se enfocan en movilizar a otras personas a través de las inspiradoras historias de distintas mujeres. Estos espacios son posibles gracias al Fondo para Mujeres, Doctora Beatrice E. Lewis, establecido por la familia de Beatrice para honrar su legado y su vida. El fondo tiene como objetivo inspirar a otras personas, principalmente a mujeres y niñas.

En esta ocasión, contamos con la presencia de Senska Jean (Promoción 2016, Haití) y Elizabeth Muthoni (Promoción 2016, Kenia) graduada becada por Mastercard Foundation; ambas son co-fundadoras del proyecto Womenful Voice; Karla Reátegui (Promoción 2005, Ecuador) primera prefecta de la provincia Zamora Chinchipe en su país; María Paula López y María José Castro, representantes de la organización Soy Niña y Laura Ureña, cantautora costarricense.

En esta nota te compartimos una píncelada de sus historias.

Un viaje a la espiral de la vida

“Tengo la necesidad de estar en silencio

de encontrarme conmigo misma

de dejar de silenciar

mi propia voz”

Con esta letra, Laura Ureña abre la sesión. Ella y su guitarra iluminan y llenan el espacio con melodías tiernas y con una poesía en forma de canción que nos habla del amor propio, de la ternura y de conectar con nuestra propia esencia. Laura canta y también habla de su vida, de sus procesos creativos para hacer su música y de la conexión que todos tenemos con el arte como seres creadores en busca de hacerlo todo con excelencia y entrega. A través de un viaje por su disco “Espiral”, Laura habla sobre algunos puntos que han sido necesarios en su vida para crecer, como atravesar un duelo con ternura y redifinir su espiritualidad.

“Para mí la experiencia humana implica que atravesamos muchas emociones. En mi caso, llegar al centro de la espiral de la vida significa aceptar la tristeza en un mundo que nos impone constantemente un positivimos tóxico en el que se considera la tristeza como algo malo. Para mí fue un reto personal aceptar la tristeza como una emoción más para aprender a vivirla y que con cada decisión que hacemos, ganamos y perdemos algo. La vida está llena de alegrías y de duelos”, compartió Laura con la audiencia.

Soberanía para las mujeres y las niñas

Senska y Elizabeth vienen de partes distintas del mundo pero han tenido experiencias de vida que las unen entre ellas y con otras mujeres. Ambas han tenido que luchar por hacer escuchar su voz, por romper con los estigmas culturales de sus países y por tener acceso a oportunidades académicas y profesionales para su crecimiento personal. Por eso, al graduarse de EARTH decidieron crear Womenful Voice, una organización que busca capacitar a mujeres y niñas de Haití para que defiendan sus derechos y atiendan sus propias necesidades mediante una educación de calidad, programas de formación y el bienestar físico y mental, para lograr resultados positivos a largo plazo.

Para poder dar forma a esta organización que ya ha impactado a más de cientos de mujeres, ambas graduadas tuvieron que ser estratégicas y unirse a más de 40 voluntarios de 17 países que las han apoyado para crear los programas de becas, mentorías, menstruación sana y reforestación.

“Desde que comenzamos nuestro paso por EARTH nos cuestionamos cómo vamos a impactar al mundo al graduarnos, por eso, Elizabeth y yo comenzamos este proyecto, porque queremos impactar la vida de las niñas y las mujeres de Haití y del mundo, queremos que sean ellas las que definan su camino y su futuro”, comparte Senska.

De la agricultura a la política

Karla Reátegui viene de una de las provincias del sur ecuatoriano, de los verdes intensos de la Amazonía. Cuando regresó a su país después de concluir su formación en EARTH, Karla trabajó como educadora y en proyectos de conservación con mujeres indígenas, con quienes también desarrolló un programa para mejorar su acceso a los mercados y para vender sus productos agrícolas a precios justos. Desde entonces, Karla tuvo un interés especial por el desarrollo comunitario y por el bienestar de las personas de su región.

“Mientras trabajaba con mujeres me di cuenta de que nosotras tendemos a invisibilizar nuestro trabajo, yo las veía hacer de todo pero si les preguntaba, decían que no hacían nada. Los roles de liderazgo comunicario eran ocupados por varones. Fue ahí en donde me dije que esa realidad tenía que cambiar porque las mujeres somos capaces de mucho. Para mí fue esencial hacer un trabajo no de competencia con los hombres, sino de empoderamiento, autoestima, amor propio con las mujeres. Esto nos abrió el camino a algo más”, dice Karla.

Así fue como nació su interés por la política, sabiendo que desde un cargo de liderazgo gubernamental podría generar cambios sistémicos para ayudar a las comunidades. Inició su carrera política desde el 2014 y quedó electa como viceprefecta. En el 2023, se presentó como candidata y se convirtió en la primer mujer prefecta de la provincia con más del 55% de los votos y más de 20 puntos porcentuales de diferencia por encima de los otros candidatos. Desde entonces, ha trabajado fuertemente por la conservación, la viabilidad y el acceso a oportunidades en Zamora Chinchipe.

¡Las niñas pueden!

María Paula López tiene quince años y habla con una determinación que estremece. Viene de una comunidad que ha sido afectada por la violencia y la falta de oportunidades. Ella forma parte de Soy Niña desde hace cinco años, cuando la organización se formó con el fin de empoderar a niñas y adolescentes para prevenir todo tipo de violencia basada en género, la deserción escolar, el aumento en los índices de pobreza, las relaciones impropias, abusos sexuales, embarazos adolescentes, entre otros.

“Soy niña me ha enseñado que el feminismo no es un capricho,  que no es el resultado de una generación de cristal, sino un llamado de consciencia a toda la sociedad por todas aquellas mujeres que no pueden hablar. Soy niña es inspiración y me ha enseñado todo lo que sé y siento sobre el amor propio, todo lo que puedo hacer y lograr. Me ha enseñado que si me esfuerzo puedo alcanzar todo lo que veo imposible porque tengo alas para volar”, dice María Paula.

En el escenario también se encuentra María José Castro, directora del programa, quien más tarde contará como la organización acompaña a mujeres jóvenes y niñas para que puedan alcanzar su mejor versión en todos los ámbitos posibles para romper con ciclos de pobreza y con la violencia de género. Gracias a Soy niña, muchas chicas como María Paula pueden crecer como mujeres fuertes e independientes.

¡Gracias a la familia Freeman, fundadores del fondo! Por hacer posible la realización de Mujeres que inspiran un año más y por permitirnos llenarnos de inspiración con las historias de las invitadas.