Una planta de lácteos para el aprendizaje experiencial

Archivado en: Noticias EARTH
Fecha: 23 de Diciembre de 2021

Son muchas las personas que lo afirman: en nuestra Universidad se elabora uno de los mejores yogures de Costa Rica. Las razones sobran: es un producto natural, sin preservantes, hecho con leche producida en la Finca Pecuaria, y con fruta fresca cosechada en las fincas didácticas del Campus Guácimo. El sabor es tan único como el proceso y la historia detrás de cada producto lácteo que se produce en EARTH. Y la lista es grande: se elaboran quesos de distintos tipos, como la mozzarella y labneh; se prepara crema dulce, dulce de leche, mantequilla, helados de infinitos sabores y el aclamado yogur. Los productos cambian según la demanda interna, las ideas de los funcionarios de la planta y los estudiantes, y la materia prima que se tenga a mano; pero algo es claro: todos los lácteos que se crean son de la mejor calidad.

Nuestro yogur.

En el 2007, el programa Hospitales y Escuelas Estadounidenses en el Exterior (ASHA) de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional (USAID), realizó la donación de la Planta de Lácteos, Este proyecto surgió a raíz de la producción de leche en los cursos realizados en la Finca Pecuaria. Con la leche producida se quiso innovar en el área de valor agregado y al mismo tiempo, crear un espacio didáctico en el que el cuerpo estudiantil puediera aprender sobre el proceso completo de la elaboración de lácteos, incluyendo la comercialización. La planta fue construida en el 2007 y cuenta con una sala de almacenamiento de utensilios, un cuarto de maduración, tres cámaras de refrigeración, un espacio para el almacén de materias primas, una oficina, un almacén de material de embalaje y un laboratorio para el análisis de leche. La planta es parte del Laboratorio de Procesamiento de Alimentos (LPA), en donde se elaboran, además de lácteos, productos como el chocolate, los embutidos, las mermeladas, salsas, entre otros.

Este espacio fue la tercera donación de ASHA dentro de las 16 grandes inversiones que el programa ha realizado hasta la fecha y sin duda, una de las que más ha beneficiado al Programa Académico de nuestra Universidad. La donación se dio para reconocer y promover las mejores prácticas de emprendedurismo compartidas entre EARTH, USAID y los ciudadanos estadounidenses. En la planta, se reciben y se procesan 2 toneladas de leche a la semana para cubrir el 92% de la demanda y el consumo interno, que incluye a la cafetería, en la se alimentan los estudiantes y algunos funcionarios y facultad, más las ventas internas de residentes y funcionarios.

“Además de crear productos para el consumo interno, nuestra meta principal es cubrir las necesidades de los diferentes cursos, como el de Procesamiento de Alimentos en el que, entre muchos temas, se estudia la elaboración de lácteos, haciendo análisis químicos de productos como el queso y el yogur; y el curso Proyecto Empresarial, en el que las y los estudiantes de segundo año pueden compartir proyectos con el LPA para la empresa que tienen que crear en esa etapa de la carrera. Por ejemplo, algunos grupos basan su empresa en la creación de helados, entonces ellos, cubren la mitad de la demanda del campus y crean sabores nuevos. En la planta les apoyamos con la materia prima y el uso de los equipos. Por otro lado, colaboramos con EARTH Futures y el Programa de Desarrollo Comunitario para trabajar con las comunidades aledañas en proyectos relacionados a la industria de lácteos”, cuenta Ivannia Sánchez, encargada de la Unidad Académica de Valor Agregado.

En la planta se gestan una gran variedad de proyectos, por ejemplo, el recién graduado José Woc (Promoción 2021, Guatemala), investigó la fabricación y valoración del mercado de tres tipos de queso: chevre, mozzarella y gouda. Como uno de sus resultados, José logró crear una receta impecable de queso gouda que ahora Ivannia, junto a otros profesores, está utilizando para crear nuevas mezclas: con gouda con rosa de Jamaica, con vino tinto y con café producido en el mismo campus. Ahora mismo, el queso está en maduración y será hasta en unos meses cuando conoceremos los resultados de un experimento prometedor.

La planta de lácteos ha sido un impulso para fomentar el aprendizaje experiencial, los conocimientos compartidos con las comunidades y la creatividad de todas las personas que pasan por el espacio. Gracias a la donación de ASHA, tenemos la posibilidad de crear yogur delicioso, la leche que consumen más de 500 personas en el campus y quesos con sabores inesperados.