Hanan es de Isiolo, una ciudad de la Provincia Oriental de Kenia. Ella pertenece a la tribu Somalí, un grupo minoritario en Kenia con raíces que abarcan varias generaciones. Hanan explica que los trabajos más tradicionales son de pastor o empresario y la agricultura es considerada como un mal trabajo. “A los Somalís no les gusta la agricultura, son más pastores. Les importa los negocios y los animales, y eso es todo. Yo bromeo y digo que soy la primera chica Somalí que estudia agricultura”.
La pasión de Hanan por la agricultura la convirtió en una rareza en su comunidad, pero aun así ella se unió al Club de Jóvenes Agricultores de su colegio y aprendió a cultivar y cosechar. Ella afirma que: “En mi cultura la mujer se cubre el cabello y usa faldas largas, y la gente piensa que por eso no podemos trabajar en una finca, yo quiero probarles lo contrario”.
Con el conocimiento que obtenga en EARTH, Hanan espera “cambiar la percepción cultural de que la agricultura es un trabajo sucio” porque ella ha visto los devastadores efectos de la sequía y el hambre tanto en humanos como animales, y siente que ese sufrimiento puede ser evitado con la introducción de agronomía sostenible en su comunidad.
