Alejandro tomó esta fotografía de su compañera Pilar Cruz López (Promoción 2014, México) cuando realizó una pasantía en 2012 para la empresa costarricense TicoFruit. Actualmente, él se encuentra realizando una pasantía en un ingenio en Chinandega, Nicaragua, con la esperanza de ampliar su conocimiento sobre la producción de caña de azúcar. Según explica Alejandro, la Universidad le ha permitido aprender mucho más de lo que se podría aprender solo de los libros.

“Hay cosas que no vienen en los libros, por ejemplo, el sudor de caminar bajo el sol al lado del cañal, las cortadas que producen las hojas de la caña si no traes equipo de protección, el factor lluvia o tormenta que no permite continuar las labores en el campo. Un libro únicamente nos enseña cómo tomar cinco muestras distribuidas en el cañal pero el libro no te dice lo difícil que es caminar cuando la caña está postrada en el suelo, si hay hormigueros en el camino o alguna serpiente”, comenta.

“En resumen, la habilidad y destreza que se va adquiriendo con la práctica en campo va formando al profesional que hará un cambio en la sociedad, ya que tiene el conocimiento de lo que en verdad son las cosas”, asegura Alejandro.

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Para Lucía, estudiante de primer año, la Universidad le da la oportunidad de aprender más allá de las paredes del aula. Sus ratos libres los dedica a ampliar sus conocimientos en temas que le generan gran interés y así puede compartir mucho más con sus compañeros. A través de Gustavo Angulo (Promoción 2014, Costa Rica), tuvo la oportunidad de conocer la finca del profesor pensionado Pánfilo Tabora.

“El profesor conoce a Gustavo y nos invitó a pasar un fin de semana en su finca. Eso es lo que tiene la Universidad, que aún fuera de clases uno puede aprender. Los profesores fuera de dar clases, tienen muchos pequeños proyectos más personales donde uno puede cooperar y aprovechar la experiencia para aprender”, reflexiona Lucía.

Ella continúa: “Esta foto es en su casa y este es un generador de electricidad a partir de agua. Por la fuerza de gravedad, el agua de la vertiente baja a través de una boquilla pequeña, generando un chorro que mueve ese molino y así se genera la electricidad para su casa. Ese chorro disparado es que está mal porque no está encajando bien y por lo tanto, no lo hace girar, entonces estábamos viendo cómo solucionar el problema”.

#2

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A inicios de año, Lucía y sus compañeros participaron en la semana de integración para los estudiantes de primer ingreso – una semana entera llena de actividades especiales que incluye talleres, mini pasantías y visitas al campo y la comunidad. Como parte de las actividades, ella visitó a un productor de pimienta en una comunidad vecina. La experiencia le permitió a los estudiantes ampliar sus conocimientos acerca del uso de biodigestores para generar gas para cocinar.

“Hasta este momento nosotros habíamos visto poco sobre biodigestores, es decir, sabíamos de su existencia pero fue hasta este momento que nos pusimos los guantes y trabajamos con la tecnología, unos a batir y otros a colar preparando la materia prima para el biodigestor”, comentó Lucía.

Para ella el hecho de salir a trabajar en la comunidad y aprender de personas que tienen más experiencia en el trabajo de campo es un valor agregado que le da la Universidad.

“Algo que me gusta mucho de la Universidad, es que el aprendizaje es experiencial pero también tú tienes una guía, bien puede ser el profesor o todos los funcionarios que estén allá, incluso los productores, pero aprendes directamente de gente que lo ha hecho ya durante años”, explica.

Isabel no había tenido contacto con la agricultura hasta que ingresó a la Universidad; tuvo una única experiencia en un intercambio que realizó en Estados Unidos cuando estaba en la secundaria y eso despertó en ella el interés por la agricultura. Al llegar a EARTH y poder sembrar sus primeros cultivos se dio cuenta de que había llegado al lugar correcto.

“La fotografía la tomé en el primer trimestre cuando por primera vez en mi vida tuve la experiencia de sembrar tanto. Para mí era todo súper emocionante, mi primera oportunidad de trabajar en el campo, de ver como empieza a germinar y a crecer. El personaje de la foto fue una casualidad. Yo le estaba tomando a la planta y salió uno de mis compañeros regando. Fue algo muy natural. Ahí es donde se refleja en realidad el trabajo experiencial en la EARTH. No es algo posado”, comentó.

Isabel sueña con regresar a Guatemala y desarrollar un proyecto de agricultura que le permita involucrar a jóvenes en situación de riesgo social, cree que los tres años que le restan en la Universidad le permitirán ir estructurando su proyecto para implementarlo una vez graduada.