Mujeres EARTH

Archivado en: Historias EARTH
Fecha: 31 de Marzo de 2023

Desde su creación, nuestra Universidad se ha caracterizado por ser fiel a sus valores y por crear oportunidades para todas las personas sin importar su etnia, sus creencias ni su género. Aunque durante mucho tiempo la agronomía ha sido vista como una carrera exclusiva para los hombres, en EARTH nos hemos esforzado por romper paradigmas y por impulsar a las mujeres a alcanzar su máximo potencial en el sector agrícola. A su vez, impulsamos la diversidad y el empoderamiento de funcionarias y facultad para lograr sus sueños y para defender su propia existencia.

El 8 de marzo se conmemoró el Día Internacional de la Mujer y por eso, hoy te compartimos la historia de tres mujeres EARTH que trabajan diariamente por crear un mundo mejor y por poder disfrutar de su libertad y su individualidad.

Una mujer que abraza la libertad

Adriana Benavides, gestora de pasantías en nuestra Universidad, le ha dado la vuelta al mundo y la mayoría de las veces, lo ha hecho sola. Desde pequeña, siempre quiso conocer otros lugares, empaparse de otras culturas, subir muchas montañas. Y así lo ha hecho, pero antes, tuvo que enfrentarse a un reto que todavía persigue a muchas mujeres: ganarse su propia libertad, romper con los estigmas que no le permitían salir al mundo porque, como dice ella misma: “existe un miedo latente a que las mujeres salgamos solas”. Aún así, ella se sacudió ese miedo y evitó las miradas ajenas para animarse a nadar en aguas abiertas, subir los cerros más altos de Costa Rica y viajar por todos los países que le fuesen posibles.

“Siento que un reto para nosotras las mujeres es pertenecer, tener lugares. Tenemos que romper esquemas para ver a más mujeres en todos los espacios. A veces pienso que es cansado para nosotras que a estas alturas todavía tenemos que seguir luchando por ganarnos un lugar en ciertos ámbitos. Se nos cuestionan muchas cosas, como cuán femeninas somos, si queremos o no queremos ser madres, o casarnos. Y nos han encasillado históricamente en ciertos roles, como en ser cuidadoras. Esos son los retos de la cotidianidad, enfrentarnos a esos cuestionamientos constantes, al miedo de salir a la calle y a esa lucha por la equidad”, cuenta.

En el día a día, Adriana trabaja con los estudiantes de tercer año para establecer un plan con respecto a sus pasantías profesionales. Esto le permite conocer a jóvenes de países y contextos sumamente diversos. “Algo que me gusta de EARTH y de mi trabajo es tener acceso a tantas culturas y tantas historias personales y sociales, eso hace que el camino a la sensibilidad sea un poco más fácil porque nos podemos escuchar y aprender unos de otros. Conocer la realidad de otras personas me ha ayudado a empoderarme, a ser más tolerante y a crecer como profesional y como mujer”, agrega.

Entre risas, cuenta que en el futuro se imagina siendo una adulta mayor – “una viejita” – que participa en competencias de aguas abiertas mientras la gente se sorprende y aplaude cuando ella, con todo el peso de los años, logre llegar a la orilla y traspasar la meta final.

Una mujer que abraza la empatía

Cuando se trata de empatía y bondad, se trata de Lluvia Azofeifa Casey (Promoción 2025, Costa Rica), una estudiante de segundo año que se ha destacado por su compromiso con la comunidad EARTH y, principalmente, con las mujeres que la rodean. El año pasado, Lluvia comenzó a asistir al Círculo de Mujeres de nuestra Universidad, un espacio seguro en el que estudiantes y algunas funcionarias, comparten sus historias, sus inquietudes y se apoyan mutuamente para crecer y mejorar. Este año, Lluvia es una de las estudiantes que lleva la batuta de este espacio, que organiza y que invita a otras chicas a unirse para generar lazos de sororidad todavía más profundos.

“En EARTH, he tenido un acercamiento con otras mujeres y he aprendido de sus realidades, distintas a la mía. Lo más impactante para mí, como mujer, es que creo que todas entramos a esta Universidad con miedo porque vamos a estudiar una carrera que globalmente ha sido dominada por hombres y en la que todavía se vive mucho el machismo. Sin embargo, he visto como poco a poco todas perdemos ese miedo, la Universidad e incluso, nuestros compañeros hombres, nos ayudan a empoderarnos y a seguir adelante”, comparte.

Para Lluvia, los Círculos de Mujeres son importantes en EARTH y en cualquier lugar porque permiten que las mujeres se abran sobre temas de los que realmente necesitan hablar para trabajar en sus procesos personales, acompañadas de voces femeninas que puedan empatizar con sus realidades.

En un futuro, Lluvia se ve así misma trabajando por el bienestar de las personas que no tienen acceso a oportunidades, a pequeños productores que no son validados en el mercado y se luchando por la seguridad alimentaria.

Una mujer que abraza la maternidad

Era 1990 cuando Yamileth Ávalos comenzó a trabajar en EARTH y cuando recién se estrenaba como madre primeriza. El trabajo y la maternidad llegaron simultáneamente para cambiar su vida y para mostrarle que, cuando se quiere y se pone empeño, todo se puede. Desde el inició de su paso por EARTH, Yamileth ha trabajado para la Asociación Solidarista de la Finca Comercial de Banano.

“Antes de trabajar en EARTH yo tenía un trabajo en Limón, viajaba todos los días dos o tres horas. Cuando tuve a mi bebé y después de la incapacidad por maternidad, no me dieron el trabajo de nuevo”, cuenta Yamileth. Para ella, su puesto en la Asociación significó una oportunidad de estar cerca de su casa en Pocora y de poder ejercer su maternidad con una mayor flexibilidad debido a que trabajaba medio tiempo. EARTH es un lugar sumamente importante para ella y para su familia.

“Lo que más me gusta de mi labor es saber que la prioridad son las y los trabajadores, saber que yo puedo ser útil para ellos me hace sentir bien. Me gusta atender a la gente, sentir que estoy colaborando en sus procesos”, cuenta.

Según Yamileth, la maternidad es el regalo más grande que le ha dado su condición de mujer. Esta es, sin duda, una elección que la ha hecho inmensamente feliz y que le ha enseñado muchísimo. Ahora, además, disfruta de ser abuela y aprende también de esta faceta.

Y de eso se trata la libertad, de que las mujeres puedan elegir su propio camino.

¡Gracias a las mujeres EARTH por enseñarnos tanto!