Producción Acuícola: una solución para los problemas globales

Archivado en: Noticias EARTH
Fecha: 28 de Octubre de 2021

A las 6 de la mañana de un miércoles, todo el Campus Guácimo se comienza a llenar de estudiantes que, con sus bicicletas, se distribuyen por los seis escenarios de Experiencia de Trabajo, un curso en el que jóvenes de primer y segundo año ponen en práctica sus conocimientos, mientras que las y los estudiantes de cuarto año realizan su Experiencia Profesional, en la que lideran cada uno de los proyectos, enseñan a sus compañeros de otras generaciones los conocimientos que, con el tiempo, ellos y ellas ya han adquirido y además, proponen proyectos en diferentes áreas junto a la facultad. Los miércoles y sábados todos están en el campo, aprendiendo sobre un sinfín de temas a través de la experiencia vivencial, uno de los factores que hacen que nuestro Programa Académico sea único en el mundo.

La pesca que realizan las y los estudiantes es artesanal.

Comunidad, Finca Pecuaria, Finca Integral Orgánica, Prácticas de Servicios Agrícolas Académicos, Finca Forestal y Finca de Cultivos, son los seis escenarios en los que el cuerpo estudiantil se divide para impulsar su formación como líderes con la capacidad de buscar soluciones a los problemas globales. Dentro de Finca Pecuaria, sobresale el proyecto Producción Acuícola, liderado por la profesora Diana Ávila y por el estudiante Arnold Katende (Promoción 2021, Uganda), becado por la Fundación Mastercard.

Una de las tilapias cosechadas.

La acuicultura se basa en la crianza controlada, el cultivo y la cosecha de organismos acuáticos, como moluscos, peces y algas. Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), en los últimos 30 años se ha disminuido la pesca de captura y eso implica un posible crecimiento futuro en el que el sector pesquero utilice la producción acuícola. En EARTH, por medio de este proceso se producen tilapias, una especie que con los alimentos suministrados, tiene un rápido crecimiento; además, tolera altas densidades y es de fácil manejo. Por otro lado, es un alimento de alto valor nutricional, aportando los nutrientes necesarios para la salud humana.

La profesora Diana Ávila.

“En la estación de acuicultura, nos encargamos de enseñarle a las y los estudiantes cómo producir tilapia, nos enfocamos en que entiendan el proceso de siembra, que es cuando ponemos los alevines; luego el proceso de crecimiento, los cuidados que debe tener un estanque, el ciclo de vida, el desarrollo del pez; y más adelante, enseñamos lo que se llama la cosecha, que es cuando retiramos los peces del estanque a través de una pesca artesanal”, comenta la profesora Diana, quien ha estado trabajando con empeño en este proyecto por casi dos años y quien, junto a la Unidad Académica, ha logrado establecer objetivos concretos para la estación que, poco a poco, se han comenzado a materializar.

Estudiantes en la estación.

Estos conocimientos, además, se entrelazan con el compromiso ambiental y las buenas prácticas agrícolas que EARTH implementa en todo el Programa Académico. Es así como el cuerpo estudiantil aprende sobre acuicultura como una solución para enfrentar al cambio climático, la inseguridad alimentaria y la explotación de los océanos y los mares por la pesca industrial.

Desde segundo año de carrera, Arnold trabaja en su proyecto Joint Organic Aquaponics, con el que está dando forma a un centro demostrativo para dar capacitaciones y talleres sobre acuaponía en Uganda.

Arnold Katende (gorra naranja) con sus estudiantes.

“Mi proyecto está directamente relacionado con la producción acuícola, porque está basado en la acuicultura para la producción de peces y en la hidroponía para la producción de plantas. La Experiencia Profesional me ha preparado para trabajar todavía mejor en Joint Organic Aquaponics, he aprendido a trabajar con las personas, en este caso estudiantes, para compartir asertivamente mis conocimientos”, cuenta Arnold, y también insiste en que su objetivo es buscar la seguridad y la soberanía alimentaria de las y los ugandeses por medio de este tipo de producción.

Tanto Ávila como el profesor Rafael Marzall, Coordinador de Experiencia de Trabajo, mencionan que este tipo de espacios permiten un aprendizaje integral, en el que tanto profesores como estudiantes se llenan de nuevos conocimientos todos los días: las y los líderes se empoderan y se preparan para salir al mundo, los estudiantes de otras generaciones indagan sobre sus principales intereses agronómicos a través de la práctica, y la facultad genera más espacios para la investigación y el desarrollo de proyectos.

Esperamos que como Arnold, más estudiantes apliquen este tipo de prácticas en sus países para hacer que el mundo sea un lugar mejor.